¿Habéis visto alguna vez un Jardín Eterno?
1º.- Tenéis que conseguir un bote de cristal que cierre herméticamente. Vale cualquier tamaño pero nosotros hemos elegido este:
2º.- Echamos unas piedras de cierto tamaño para que se quede el agua sobrante abajo pero sin contacto directo con la tierra:
3º.- Echamos el carbón para evitar el moho ( Recubrimiento velloso o filamentoso producido por diversos tipos de hongos sobre materia orgánica, que provoca su descomposición).
4º.- Ponemos tierra normal de maceta no demasiado apretada hasta la medida que consideremos y empezamos a plantar aquellas plantas que queramos formen parte de nuestro jardín:
5º.- Cuando hemos puesto las plantas, en este caso fresas y helechos de dos tipos, cubrimos lo que queda de tierra con musgos, le echamos agua y cerramos el bote:
Y aquí nos veis haciendo una broma:
Pol, que es el"profe" que nos lo ha enseñado, vendrá a vernos los próximos días y comprobará que la cantidad de agua que le pusimos, fue la suficiente.
Es una perfecta manera de conocer la fotosíntesis, el efecto invernadero, el crecimiento de las plantas, y desde luego, la necesidad de cuidar Nuestro Medio Ambiente.
Esta ha sido la muestra que Pol nos ha traído:
Hay que tener en cuenta ciertos cuidados:
a) No se puede voltear
b) No le pueden dar lo rayos del sol (las plantas morirían, el cristal haría de lupa)
c) Una vez cerrado, a no ser por Pol, no se puede abrir.
¡GRACIAS POL!